Poesías inolvidables |
Alma de Italia |
Para librarme de lo
imprevisto
cuando mi estancia se
queda sola,
guardo en mis ropas
un Santo Cristo,
un Santo Cristo y una
pistola.
Si quien me acecha,
siendo un malvado,
también es hombre de
religión,
valdrale el Cristo
crucificado,
si no, el revólver de
doble acción.
Yo soy un alma que el
miedo asedia,
mas ¡guay del hombre
que me maltrata!
como los frailes de
la Edad Media,
la propia mano
bendice o mata.
Y por librarme de lo imprevisto
cuando mi estancia se queda sola,
guardo en mis ropas un Santo Cristo,
un Santo Cristo y una pistola.
Amado Nervo
Del libro “El éxodo y las flores del camino”. |