Poesías inolvidables |
Con el tiempo |
Después de un tiempo, uno aprende
la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma, y uno aprende
que el amor no significa acostarse y una compañía no significa seguridad, y uno
empieza a aprender
que los besos no son contratos y
los regalos no son promesas,
y uno empieza a aceptar sus
derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos,
y uno aprende a construir todos
sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es
demasiado inseguro para planes
y los frutos tienen una forma de caerse
en la mitad.
Y después de un tiempo uno
aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema.
Así que uno planta su propio jardín
y decora su propia alma,
en lugar de esperar a que alguien
le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede
aguantar,
que uno realmente es fuerte,
que uno realmente vale, y uno
aprende y aprende
y con cada día aprende.
Con el tiempo aprendes que estar
con alguien porque te ofrece un buen futuro significa que tarde o temprano
querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo comprendes que sólo
quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede
brindarte toda la felicidad que deseas.
Con el tiempo te das cuenta de
que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente
acabarás no deseando volver a verla.
Con el tiempo entiendes que los
verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos, tarde o temprano
se verá rodeado sólo por amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que las
palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste,
durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que
disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si
has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a
ser igual.
Con el tiempo te das cuenta que
aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que dejaste
ir.
Con el tiempo te das cuenta de
que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.
Con el tiempo te das cuenta de
que el que humilla o desprecia a un ser humano, tarde o temprano sufrirá las
mismas humillaciones o desprecios multiplicadas al cuadrado.
Con el tiempo comprendes que
apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sean
como esperabas.
Con el tiempo te das cuenta de
que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo
justo en ese instante.
Con el tiempo verás que aunque
seas feliz con los que están a tu lado, añorarás terriblemente a los que ayer
estaban contigo y ahora se han marchado.
Con el tiempo aprendes que
intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que
necesitas, ante una tumba, ya no tiene ningún sentido.
Pero desafortunadamente, sólo con
el tiempo.
Verónica Shoffstall |